Existen muchas marcas, materiales, diseños de lentes de contacto, así como hay una variedad de ojos, es complicado encontrar ojos con los mismos parámetros incluso en una misma persona los parámetros pueden ser muy diferentes.
Es por esto que es importante hacer pruebas para conocer las condiciones de salud visual de cada paciente, se tiene que valorar graduación, curvatura corneal, calidad lagrimal, forma de los párpados ya que todo esto influye en la estabilidad del lente de contacto.
Si ya eres usuario de lentes de contacto también es importante que valores la salud de tu córnea mínimo una vez al año y actualizar tu graduación. Los lentes de contacto mantienen un roce constante durante todo el tiempo de uso con la córnea por lo que desgastan el epitelio (la capa más externa de la córnea y la única que se regenera). Es por esto que no es recomendable dormir con ningún tipo de lente de contacto.
Existen lentes de contacto de uso diario, mensual y anual. Entre más tiempo pase el mismo lente de contacto en la córnea hay más probabilidades de que se contamine y esto nos lleve a tener una infección y alguna complicación por mal uso de lente de contacto. Por eso las indicaciones para cualquier tipo de lente de contacto son:
- NO dormir con lentes de contacto.
- NO nadar con lentes de contacto.
- NO bañarse con lentes de contacto.
A cualquier mínima molestia, enrojecimiento ocular o mala visión con el lente de contacto es necesario que acudas a una revisión para asegurarse que la salud de tus ojos esté bien. Acude siempre con un profesional de la salud visual, acude con un licenciado en optometría. El o ella deberá mostrar siempre una cédula profesional.